lunes, febrero 11, 2008

My Nightingale


Me sorprendiste con tus manos acogedoras, me sorprendiste con tu boca de otras bocas, me sorprendiste con tu corazón marchito queriendo latir a pasos agigantados, me sorprendiste con tu ternura y con los ojos que me protegieron de sus ojos.

Me sorprendiste con tu fuerza que me da fuerza, me sorprendiste con tu música que me da nuevas canciones aunque todavía las comparta, me sorprendiste con tu ternura y con las manos que me protegen de sus manos.

Me sorprendiste con tu vida que me da vida, me sorprendiste con tus brazos que me cobijan y me rescatan, me sorprendiste con tus lágrimas que cuando caen secan mis lágrimas, me sorprendiste con tu generosidad y con tu silencio que me rescata de su silencio.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

POCO A POCO...CON TUS BESOS Y TU GUITARRA HAS SOLTADO ESTA ARMADURA QUE ME ACOMPAÑABA, ME HAS LIBERADO.
MIENTRAS ESCUCHO TUS EMOCIONES CONVERTIDAS EN UNA CANCION TE ACARICIO CON EL ALMA.
UNA PRINCESA QUE CREIA EN CUENTOS DE HADAS

Anónimo dijo...

no preguntes por que, ni yo lo se,
me haz inspirado y recordando tambien a bendetti, te dedico este poema hecho especialmente para ti:

tengo una soledad tan concurrida, llena de nostalgias, rostros de ti, favores de ti, besos de bienvenida y adioses tristes que tu rostro no observa

tengo una soledad tan concurrida que puedo ordenarla por promesas y deseos, mientras tu rostro mira a otra parte, con tus ojos de amor que ya no aman, que entregaron tu vida entera y no confiaron

tu rostro tiene ojos de hambre que miran y miran y, no advierten mi presencia
tus ojos en tu rostro se sorprenden por otras y no ven que estoy tan cerca

quisiera estar confiada en que una tarde cualquiera te acerques y te mires, quisira estar confiada que en esa misma tarde te mires al mirarme

si tu rostro de amor no me corresponde, te dejare tranquilo con tu mar, tus amores y tus amaneceres, descifrandote a solas, con tu rostro de hambre que mira y que mira y aun no me ve

pero no creas,
no creas, es un engaño, estare acompañandote en tus amaneceres, en la orilla del mar que golpea la arena, en tus canciones, en tu sombra, en tus penas, cuando mires a un perro, cuando la pena te embargue y no puedas levantarte, a la orilla del camino, cuando estes trizte y si algun dia me dejas, estare en tus sueños para quedarme contigo

Anónimo dijo...

Lamento interrumpir, pero este lagarto alguna vez fue amigo mío. En Antofagasta y con enfermera particular, pareces un cliché de Sabina.

Leo tu blog con regularidad.

Saludos guayaquileros

César

José Miguel dijo...

Cesar que cantidad de años visita "mis canciones" creo que despues de rato caminan para algun lado, salud!

MAFALDITA dijo...

UF !!!
BUENÍSIMO ESTE POST...
POR LAS DUDAS ME FIJÉ SINO ME EQUIVOCABA...PERO NO!
PISCIANO TENÍA QUE SER!!!